Las emociones inofensivas y mi lata de pepsi light

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Yo ando solo
Soy tan solo....
No recibo nada, no doy nada, no espero nada.

Solo soy un loco.
La soledad es mi copañera
Las palabras divagan sueltas por mi mente,
no uno las frases ni puedo hilar oraciones ni conjugar los
verbos correctamente.
Al no unirse las palabras, mis pensamientos son tinieblas, una vista borrosa y cansada... por un momento algún concepto toma forma y enseguida se esfuma sin dejar rastros, no hay concentración.

Ahora no pienso en nadie,
vivo sin lujo alguno, caminando solo, durmiendo 16 horas para no sentir el peso de el mismo tiempo.
Hace mucho que nadie se ocupa de saber como empleo mi tiempo; el que anda solo nisiquiera sabe como contar, lo verosimil se desvanece al mismo tiempo que los amores y los amigos. También observa los acontecimientos y vive analizando a gentes que van y vienen, haciendo un segundo de historia, poniendo cuidado a las conversaciones estupidas... siendo así pues, un testigo fiel de cualquier suceso pendejo.


Con tiempo de sobra para rascarme los tanates y leer periodicos amarillistas, ando por la vida, sin deternerme jamás a mirar el reloj...

Simpre que necesito reír, tengo que levantarme a las 5 de la mañana a ver algun canal de caricaturas, ya que la risa por si sola no puede salir; es raro que un hombre solo le den ganas de reír, por ese lado no me sorprendo.

Para donde quiera que giro, hay objetos mutando de su forma original a una completamente insolita. Este bote de pepsi, por ejemplo; su color es tan plateado, como si fuera una bebida espacial, y tiene una textura tan delicada.... ahhhh!... Comprendo, he llegado de masiado lejos, pero uno no puede preveer los inconvenientes de estar solo; Pero esto significa que sea un enfermete,aún no he tocado fondo, jamás reviso bajo la cama antes de acostarme, ni me da miedo el ruido del viento azotando las puertas. Pero de cualquier forma estoy inquieto, hace ya mas de media hora que evito mirar este bote de pepsi... cada que volteo, veo de arriba a izquiera, pero no hago contacto con su efecto metalico, siento que me quedaré hechizada para siempre y no podré abandonarlo a sus suerte al bote de basura, si vuelvo a mirarlo no podre deshacerme de el, aunque ya no tenga refresco en su interios...!!!, lo adoptare, vivire con él como si fuera mi mujer, le juraría amor eterno, incluso hasta le guardaría fidelidad absoluta haciendo un voto de castidad.........

Ningún célibe puede ayudarme, solo se limitarían a palmearme el hombro, tratando de encontrar el momento para marcharse y dejarme solo con mi nuevo amor ( la lata de pepsi). Se que es más que una lata de refresco, pero ya no puedo explicar lo que veo, me escurro por la silla que tengo frente al monitor y me dejo caer debajo de el escritorio, entre cables polveados,acurrucandome un momento... tengo miedo!, me voy hacia el lado oscuro.




Estoy solo...!, casi anacoreta.
En medio de tanta voz alegre, todos felices de opinar lo mismo, de ser de la misma estirpe puerca, basta ver la cara de todos para vomitar.... todo iguales, diciendo las mismas expresiones, moviendose igual, bebiendo lo mismo, afirmando todo el mundo con la cabeza, gritando un Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!! si, somos iguales, todos nos comprendemos y vivimos en la hermandad de mierda. Alma de autista. todos somos mierda,... yupi!!!....


Estoy solo, vivo a dos cuadras del país de la mierda!



un Hada nocturna me dice algo al oido pero no puedo escucharla bien, porque creo que ha bebido demasiado mezcal.


Un minuto de paz para desembarazarme de la verosimilitud de un instante oportuno.